El último método, totalmente ilegal, para no ser ‘cazado’ por los radares viene de Rusia y consiste en unos adhesivos que ocultan los números de la matrícula. En QM.com nos hacemos eco de él para mostrar hasta qué punto la mente humana es capaz de inventar fórmulas para vulnerar las leyes. Quien lo utilice se puede arriesgar a graves sanciones.