El estado de ánimo repercute considerablemente en la forma de conducir. Si estamos enfadados, realizaremos maniobras agresivas. Si, por el contrario, tenemos un buen ambiente, iremos tranquilos, lo que aumenta la seguridad.
No es lo mismo conducir enfadados que con buen ambiente, ni mucho menos. Si vamos discutiendo con la pareja o los hijos, tenderemos a realizar maniobras agresivas (adelantamientos peligrosos, sin cumplir con la distancia de seguridad, etc). Por el contrario, si vamos relajados y risueños, la conducción será más sosegada y cumpliremos con las normas, por lo que aumentará la seguridad.
Por lo tanto, dejad las polémicas para cuando acabéis de viajar y relajaos mientras tanto escuchando música tranquila o hablando de temas poco espinosos (incluso contando chistes o situaciones graciosas).
Mercedes-Benz vuelve a ser el vehículo oficial y patrocinador del Mutua Madrid Open, la cita de tenis más relevante de… Leer más
Aston Martin actualiza el DBX707. El SUV de la marca británica de prestaciones bestiales presenta un nuevo sistema de infoentretenimiento… Leer más
En su tercera edición, Autopía se ha consagrado como el lugar de referencia en el que aquellos que viven la… Leer más
Los extremeños Ángel Santos y Mario Osma, consiguieron el segundo puesto en el Eco Rallye Villa de Llanes, tercera prueba… Leer más
Desde la electrificación de vehículos hasta los coches por suscripción mensual, estamos presenciando una evolución significativa en la forma en… Leer más
Los Motor Awards, los premios del sector con una mayor participación de los internautas, más de 160.000, han recaído este… Leer más