La tercera generación del modelo japonés, basada en el prototipo iV-4, equipa motores eficientes de bajo consumo y esquema de tracción a las cuatro ruedas AllGrip. Se fabricará en la planta que la firma asiática posee en Hungría a principios de 2015.
Como avanzamos a principios de septiembre, el Salón del Automóvil de París ha acogido la presentación del nuevo Vitara, desarrollado a partir del prototipo iV-4. La tercera generación del modelo japonés comenzará a fabricarse, a principios del próximo año, en la factoría que Suzuki posee en Hungría.
Una de las características de la tercera generación del Vitara es que se podrá personalizar a gusto de cada usuario. Así, la marca ofrecerá 15 colores diferentes y atrevidas combinaciones bitono. Además, al igual que el S-Cross, ha sido dotado de un techo solar acristalado formado por dos paneles.
En el apartado mecánico, la oferta del Vitara contemplará un propulsor de gasolina y otro diésel, ambos de 1,6 litros y con una potencia similar: 120 CV. Estas motorizaciones se combinarán con cajas de cambio manuales –de cinco y seis marchas, respectivamente– y la primera de ellas también podrá asociarse a una transmisión automática de seis relaciones.
Además, el nuevo Vitara monta un esquema de tracción integral AllGrip, con cuatro modos de respuesta, y sistemas y dispositivos como programa electrónico de estabilidad (ESP), mitigador de colisión (RBS) –llega a detener automáticamente el vehículo en caso de alcance–, control de crucero adaptativo (ACC), etc.