El Lés a Lés, la ruta mototurística que atraviesa Portugal, celebraba este año su 25º aniversario. Unas bodas de plata en las que la climatología exigió su cuota de protagonismo con lluvia y tormentas, pero, a pesar de ello, no diluyó el éxito de organización y participación, 2.185 inscritos, que se enfrentaron a 1.085 kilómetros durante tres intensas jornadas.
Si el calor, muchas veces excesivo, de la casi totalidad de las ediciones anteriores de este rally maratón que atraviesa Portugal se hacía notar, en esta ocasión el invitado imprevisto fue la lluvia, las tormentas y el barro. Un agua necesaria y urgente para el campo y para los embalses que se estaban quedando secos en toda la península y que parecía querer descargarla toda de repente en esos tres días del recorrido.
La lluvia quiso ser el centro del evento, pero no lo consiguió, porque el protagonismo del mismo estaba reservado a los sufridos motociclistas, que no se amedrentaron ante las condiciones adversas que presentaban las carreteras y pistas elegidas con acierto por la organización, siempre buscando los parajes más bellos, los rincones más desconocidos y los pueblos más auténticos; siempre encontrando como dar a conocer y enseñar el paisaje, la historia y la gastronomía de nuestro vecino país hermano.
Protagonista fue también la organización, que, a cargo de la Federación Motociclista Portuguesa, tuvo que cambiar en el último momento el lugar de encuentro de los más de dos mil motociclistas que llegaban a Bragança para pasar las verificaciones y recoger la documentación de su participación en el rally, así como otros problemas a solucionar por la “bendita lluvia”, demostrando en todo momento su experiencia y profesionalidad.
Y no menos protagonistas fueron los siempre entregados moto clubes portugueses que preparan su teatralización en los puntos de control para animar, entretener y divertir a los esforzados participantes eligiendo el lugar de fichaje y un motivo para sus siempre originales coreografías. El Moto Clube Cruzeiro, Moto Club de Porto, Moto Club de Prado, Moto Galos de Barcelos, Moto Club Estarreja, los Conquistadores de Guimaraes, Mototurismo do Centro, MK Makinas, Moto Club de Gois, los Motards of the West y el Moto Club Albufeira, unos veteranos y otros noveles, cumplieron a la perfección en su labor de controles de paso y de entretenimiento en los pequeños descansos de la inmensa caravana.
Si los puntos de control son siempre un éxito de la organización, no podemos olvidar los oasis tan necesarios para paliar el hambre y la sed de los participantes, que colocados estratégicamente en el recorrido ofrecen ricas biandas y bebidas en las cortas paradas que sirven de descanso a la conducción. Oasis en los que también estaban presentes las marcas de motos: BMW (cuyos modelos GS eran mayoría entre los inscritos), Honda, Yamaha, Indian y Suzuki, además de firmas comerciales igualmente colaboradoras del evento, como BP, Dunlop, Vía Verde, Nexx y Abreu, marcas todas ellas que han entendido la importancia de este acontecimiento.
En esta edición tocaba recorrer el país en dirección Norte-Sur y nada mejor que elegir la ciudad de Bragança, punto más cercano a la salida de la primera edición, allá en el año 1999, en que esta loca idea de cinco moto clubes partió desde el emblemático puente de Río de Onor para terminar en el cabo de San Vicente en 24 horas ininterrumpidas. Durante tres ediciones se mantuvo ese formato, para en 2003 repartir el kilometraje en dos intensas jornadas, en 2007 se añadió la etapa prólogo y desde 2017 pasaron a ser tres días, con más tiempo para las visitas mototurísticas repartidas en el camino.
En la jornada inaugural, después de recoger las acreditaciones y pasar las verificaciones, los más de dos mil motociclistas partimos bajo una intensa lluvia para realizar la etapa prólogo inaugural que durante más de tres horas nos llevó por las bellas y retorcidas carreteras del Parque Natural de Montesinho, pasando por el emblemático puente frontera de Río de Onor que divide al pueblo en dos mitades, una portuguesa y otra española y donde se habla el Rionorense, un dialecto local que entienden tanto portugueses como españoles.
Desde Bragança a Viseu, desde Viseu a Ourém y desde Ourém a Vila do Bispo, las tres etapas del recorrido que, salvo la última, estuvieron protagonizadas, como digo, por la lluvia y las intensas tormentas que hicieron que no se pudiera prescindir de la ropa de agua en ningún momento. Finalmente, la tercera y última, como “No hay bien que dure para siempre, ni mal que nunca termine”, se pudo recorrer totalmente en seco. De esta forma, todos pudimos disfrutar un poco más de la conducción de esta larga etapa que nos llevó hasta el Océano Atlántico en el Algarbe portugués, finalizando en Vila do Bispo las sesenta páginas del bien elaborado roadbook por la organización de este rally maratón, el rally Mototurístico más importante de Europa.
Por nuestras retinas pasaron algunas ciudades, muchos recónditos pueblos y aldeas, puentes pintorescos, de piedra y metálicos (Ponte Rainha D. Amélia de 1904), murallas y castillos, palacios, antiguas quintas, dólmenes, iglesias y ermitas, casas solariegas, montañas y ríos, presas y pantanos, mucha historia y cultura y, sobre todo, soberbios paisajes de un Portugal para la mayoría desconocido.
Tesoros de la historia del país luso en unas estudiadas rutas de descubrimiento y aventura por algunas de las carreteras municipales y regionales más bellas, así como pistas escogidas para la ocasión. Las carreteras nacionales, las vías rápidas y autopistas quedan para el regreso a casa de los sufridos y satisfechos motoristas participantes en esta edición que será recordada por las inclemencias atmosféricas que nos trajo “Óscar” en el 25º Aniversario de la prueba.
Por Mariano Parellada, Presidente Moto Club La Leyenda Continúa
Algunas cifras del Lés a Lés
Primera edición en 1999: 120 participantes
Edición 2023, 25º Aniversario: 2.185 participantes
Recorrido oficial: 1.085 km
Piloto más joven 2023: Madalena, 18 años, con Yamaha 125
Km recorridos en las 25 ediciones: 25.631 (sin contar los realizados para llegar y volver a casa)
Participantes en las 25 ediciones: 29.736 motociclistas
Nacionalidades de los participantes: 14
Motociclistas que han realizado las 25 ediciones: 4
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