Un total de 254 motoristas han perdido la vida en accidentes de tráfico en España, según un informe de la Dirección General de Tráfico. A pesar de los avances en seguridad vial, muchos de estos accidentes podrían haberse evitado si los conductores hubieran utilizado un casco homologado de calidad. Según pruebas realizadas por Motocard, los cascos falsificados no resisten ni una simple patada.
Los cascos que cumplen con la normativa europea ECE 22.06 están diseñados para resistir impactos y proteger la cabeza del motorista, reduciendo significativamente el riesgo de lesiones graves. El uso de un casco adecuado no solo es esencial para la seguridad, sino que puede marcar la diferencia entre una lesión leve y un daño irreversible.
Lamentablemente, muchos motoristas recurren a cascos falsificados o de baja calidad, especialmente en plataformas online donde los precios son más bajos. Estos cascos no pasan los controles de seguridad y, por lo tanto, no ofrecen la protección necesaria en caso de accidente. Además, están fabricados con materiales que no han sido probados para resistir impactos. La Organización Mundial de la Salud destaca que el uso adecuado de un casco homologado puede reducir hasta un 70% el riesgo de sufrir lesiones cerebrales graves. Por eso, es fundamental recordar que la seguridad nunca debe ser un lujo, sino una prioridad. Invertir en un casco homologado es esencial para garantizar nuestra protección en la carretera.
Un casco no homologado, un riesgo para tu integridad
En una reciente prueba llevada a cabo por expertos de Motocard, se ha comparado un casco AGV Pista GP RR, con una falsificación que imita al modelo original, la cual se vende a un precio sorprendentemente bajo en una conocida plataforma online. Durante la prueba, el casco falso ha demostrado que no puede resistir ni una simple patada, rompiéndose toda su estructura casi al instante.
El resultado de este experimento, además de ser impactante, evidencia el alto riesgo que supone para los motoristas adquirir cascos en plataformas de grandes superficies, donde gran parte de la equipación que se vende carece de la homologación pertinente o lleva etiquetas falsas. Por lo tanto, confiar en productos de baja calidad y precio no debería ser una opción, especialmente cuando se trata de equipación para la seguridad personal.
La normativa europea ECE 22.06 es clara y exigente, haciendo que cada casco pase rigurosos controles de resistencia. Pero los materiales que se utilizan en plataformas online sin verificación para la fabricación de estos cascos no han pasado por ningún control, por lo que no pueden garantizar la resistencia de estos ante impactos o la protección de la cabeza del motorista en caso de siniestro.
La seguridad no es un lujo, es una necesidad
Motocard recuerda que el Reglamento General de Circulación en España exige a todos los motoristas y pasajeros el uso de cascos homologados en cualquier tipo de vía. Sin embargo, algunos usuarios se ven atraídos por los precios bajos de estos cascos vendidos por mayoristas sin considerar las consecuencias, y si una cosa está clara es que no deberíamos ponerle precio a nuestra vida.
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